Cuando empezamos a buscar un conjunto importante de medición, es muy fácil optar por el todopoderoso sistema de metrología, que no puede fallar debido a la medición precisa necesaria para obtener una aprobación o reprobación instantáneas.

Pero no todo se resume al coste del sistema y esto no siempre se refleja en la precisión que espera alcanzar.

Qué es lo que está midiendo

Todo se resume a lo que estamos intentando medir. La inversión en un buen microscopio óptico de medición puede permitirnos la medición de esas pequeñas características con un tamaño equivalente al décimo de un micrón Y economizar nuestro presupuesto, sin tener que comprometer la precisión..

Ha medida que los componentes de nuestros libros se hacen cada vez más pequeños, los CMMs se están volviendo menos eficientes, no sólo por su esfuerzo para la medición rápida de características con sondas difíciles de manejar, pero también porque no nos permiten inspeccionar las características de la superficie o proveer esa importante medición sin contacto, absolutamente esencial para los componentes críticos como los dispositivos médicos.

La inspección no es posible con CMM

Los microscopios de medición óptica nos permiten inspeccionar características de la superficie que no podrían ser inspeccionadas utilizando CMMs. Esto se debe al gran aumento que nos permite inspeccionar características y características de la superficie que no pueden ser visualizadas a simple vista.

Tener la capacidad de inspeccionar características de la superficie durante las rutinas de medición significa que podemos inspeccionar defectos de la superficie como la calidad de revestimientos o defectos de fabricación como la existencia de rebabas y arañazos.

Los microscopios ópticos de medición utilizan una resolución microscópica, una imagen puramente óptica, y esto en conjunto con el mejor sistema de reconocimiento de imagen conocido – el cerebro humano. Juntos, son capaces de proveer una medición de alta precisión, particularmente para componentes de difícil visualización o características complejas.

¿La medición por video es una alternativa?

La alternativa sería una orientación en dirección al sistema de medición por video, pero ni siquiera los sistemas de video nos pueden ofrecer la fidelidad que podemos obtener con los sistemas ópticos.

Aún con los microprocesadores de mayor densidad ahora disponibles para los sistemas de video, que reducen la distancia cada vez menor entre la resolución óptica y la resolución de video, los sistemas de video nunca podrán simular lo que puede visualizar a través de un sistema óptico.

A pesar de la calidad de imagen del video estar mejorando con los microprocesadores de mayor densidad, los microprocesadores estarán siempre limitados por cuán pequeños puedan ser los microprocesadores por la longitud de onda de luz que necesitan para producir una imagen.

De la misma forma, con una imagen óptica no necesitamos de ajustar o calibrar una pantalla para visualizar una rendición de color precisa, como con un sistema de video, ya se encuentra delante de nosotros.

El equilibrio de blancos también puede ser un problema, especialmente si existe un sistema de video midiendo un catálogo de piezas componentes. Las ligas altamente reflectoras requieren que el equilibrio de blancos esté muy bien ajustado y si no tenemos cuidado podemos pasar muchísimo tiempo ajustando los controles de la cámara para obtener una margen de alta definición para medición, en vez de simplemente utilizar una cuadrícula para captar puntos de lo que podemos visualizar inmediatamente a través de un sistema óptico.

En pocas palabras

En resumen, un buen sistema óptico tiene un impacto menor que un CMM y frecuentemente también tiene un coste menor.

Para aquellos de nosotros que estamos buscando la precisión de un décimo de micrón y la medición de características que no siempre son visibles a simple vista, un sistema óptico es un buen punto de partida.

Si necesitamos de inspeccionar las características de la superficie y nuestros componentes críticos están en peligro de deformación, debería ser considerado un sistema óptico. Si además de estos factores los componentes también son complejos, sin márgenes fácilmente definidas, y la rendición del color es igualmente importante, entonces un sistema óptico puede ser la única opción. ¡Si lo puede ver, lo puede medir!